Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- La exposición al sol por más de 30 minutos en la población infantil por el incremento de actividades al aire libre puede provocar quemaduras de primer y segundo grado, informó Bertha Edith Guillén Palacios, Dermatóloga Pediatra del Hospital de Especialidades Pediátricas.

La especialista sugirió el uso de fotoprotectores solares inertes o físicos, que funcionan como pantallas solares y que son específicamente indicados para niños y adolescentes, mismos que tienen un espectro de protección más amplio.

“Estos fotoprotectores nos cubren de los rayos ultravioletas A, B y C, por lo tanto son los más adecuados para su uso en población infantil”, indicó la Dermatóloga Pediatra del Hospital de Especialidades Pediátricas.

Hay que tomar en cuenta, dijo, que no se debe utilizar únicamente los fotoprotectores físicos, sino también, sombrillas, sombreros de ala ancha, lentes para sol y vestimenta adecuada.

Se deben- añadió- aplicar el fotoprotector solar 30 minutos antes previo a la exposición al sol y con series de aplicación de entre 3 y 4 horas.

Entre las medidas de alarma que se deben tener en cuenta: erupciones o eritemas en la piel, no exponerse en demasía entre las 10 de la mañana y 4 de la tarde, pues es cuando los rayos ultravioletas están en su punto máximo.

Los protectores solares de “30” son los más adecuados para su uso y aplicación cada tres horas. Recomendó que por ninguna forma se usen remedios caseros y si el pequeño muestra daño en la piel luego de exponerse por alrededor de 10 minutos, retirarlos inmediatamente del sol, pues se pueden provocar quemaduras de primer y segundo grado.

Las quemaduras por exposición al sol se muestran con mayor frecuencia en épocas de calor, sobre todo en pequeños con enfermedades genéticas.

En caso de presentarse quemaduras no aplicarse nada y acudir al médico más cercano para su adecuada atención.